Hace décadas, los sastres aprendían su oficio cosiendo camisas hechas con restos de tela. Con el tiempo, un elemento básico del estilo preppy lúdico evolucionó a partir de la práctica: la camisa divertida. esta versión combina dos patrones de rayas característicos en una sola pieza llamativa, adornada con el icónico caballo de polo.